Sevilla, 27 de Diciembre 2012.
Hola.. ¿cómo estás?
Ah.. lo entiendo.. no quieres hablarme..
La verdad, te escribía para pedirte perdón.. Lo siento, no tengo escusa... No, no me pidas motivos.. No puedo decirte que te abandoné por un cuaderno y una pluma.. te destrozaría.. No insistas! ¿No lo entiendes?¿No lo quieres entender? Te pido perdón, te abandoné, por las buenas, ni me despedí.. Pero aquí estoy.. He comprendido que puedo estar con ambos. Perdóname. Tú has sido testigo de tanto, te he contado tantas cosas... Ese cuaderno no puede igualarte! Y de la pluma.. qué decir de la pluma.. Ya no la quiero, se quedó sin tinta.. ¡eso a ti no te pasará! No se qué ronda por mi mente.. ME HE OLVIDADO HASTA DEL ANIVERSARIO DEL MEJOR DÍA DE MI VIDA! eso no se me puede perdonar... Dame otra oportunidad. Volveré a escribirte, te lo prometo, solo, perdóname.
Besos, Albar i coque.
1 comentario:
Pues al final no has vuelto a escribir aqui. ¿esque se te han secado las ideas? Pus umedecelas que sin duda siguen hay. ¿O acaso ya no tienes tiempo para la poesia? Yo cai en ese error pero cree me siempre hay tiempo para la poesia.
Publicar un comentario